La conservación del medio ambiente es tarea y responsabilidad de todos. Cómo decía Mahatma Gandhi “tú debes ser el cambio que quieres ver en el mundo”.

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Por ello, nuestra relación con el medio ambiente ha de ser respetuosa, solidaria y optimista.

 

 

 

¿Optimista?. Sí, claro. El optimismo se caracteriza por la tendencia a confiar en que el futuro sea favorable, por lo que una actitud optimista contribuye a afrontar las dificultades con buen ánimo y perseverancia, y en lo que al medio ambiente se refiere, te tomarás verdaderamente en serio tu contribución.

Te proponemos, a modo de ejemplo, algunas pautas de consumo sostenible que se incorporan en nuestro día a día, que seguro conoces, y que sólo tú sabes si practicas siempre que puedes:

  • Nos vamos a la compra: asegúrate que los productos de tu cesta están envasados e identificados correctamente (punto verde o símbolo del sistema de gestión).
  • En nuestra higiene diaria: ¿Cierras el grifo SIEMPRE mientras te cepillas los dientes?
  • Al parque con los niños: ¡Mamá qué bien huelen las rosas!, pero no se tocan, ¿eh?.
  • Nos transportamos: ¡Qué difícil!… ya, nadie dijo lo contrario, pero es básica tu colaboración. ¡Proponte caminar más!. Además tu corazón, tu silueta y tu bolsillo lo agradecerán.

Te animamos a hacer crecer esta pequeña lista, empieza por titularla: Yo colaboro en el mantenimiento del medio ambiente con….

¡Practica el optimismo ecológico!

Esperamos que este artículo sea de su interés y utilidad. Estaremos encantados de recibir sus comentarios y aportaciones. Gracias

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2 comentarios

  1. Me encanta este post…
    si podemos seguir sólo algunas de estas pautas…todo funcionaría mejor..verdad?
    me decía que no es más limpio quien más limpia…sino quien menos ensucia… es ésta la filosofía…no?

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